El voto de confianza de François Bayrou, una amenaza "kamikaze"
Al anunciar una moción de confianza el 8 de septiembre, el primer ministro francés se guarda sus cartas, analiza el periódico sueco Dagens Nyheter. O sobrevive y se adoptan sus medidas de austeridad, o cae, y su caída corre el riesgo de desencadenar una crisis financiera.
François Bayrou se juega mucho, pero también su viejo amigo y socio, Emmanuel Macron. El primer ministro y el jefe de Estado habían planeado cuidadosamente la impactante declaración del lunes [25 de agosto] . Pero es difícil ver cómo lograrán hacerla realidad.
“Nuestro país está en peligro porque estamos al borde del sobreendeudamiento. Francia no puede ignorar este peligro. Se encamina hacia un desastre [si no toma decisiones valientes]”, advirtió Bayrou en una conferencia de prensa, donde advirtió repetidamente sobre la posible inminencia de una crisis financiera. “Cuando la casa se está quemando o estamos al borde del hundimiento, debemos aceptar la situación. En la medida de lo posible, no permitiré que nuestro país se hunda en este riesgo; debemos tomar una decisión”, insistió.
Está claro: François Bayrou está convencido de que Francia ya no puede permitirse vivir por encima de sus posibilidades. El déficit presupuestario francés se situó en el 5,8 % el año pasado, muy por encima de la norma europea que establece el límite en el 3 %. La deuda pública, por su parte, se situó en el 114 % del PIB, lo que sitúa al país en tercer lugar entre los 27 Estados miembros de la UE. Solo Grecia e Italia están en peor situación.
Courrier International
